Hërpes : "La batalla de Hërpes es seguir vivos y ser consecuentes con nosotros mismos"
Existe una banda de amigos nerviosos encapuchados brutos que adoran tocar, vivir en su mundo y cabecear adoquines. Su nombre es Hërpes. Ellos son Pablo Abal, Leandro Bajar, Nicolas Dorado y Rafeal Barrera Oro. El viernes 14 de octubre presentan su segundo disco "El Club de los Monstruos" en Club V.
¿Cómo se preparan para la presentación de "El Club de los Monstruos"? PABLO: Con ansiedad, porque nos encanta nuestro disco y ese día empieza su época. También escribimos una lista de temas mas extensa que de costumbre. Van a tocar 3 bandas alucinantes como Delirium Extremus, Velocidad 22 y Jesusto que vienen desde Chile. Y como siempre, nos preparamos con ensayos, sudor, tucas, envases, agite y mas sudor.
¿Qué es "El Club de los Monstruos"? LEANDRO: El club de los monstruos es el lugar al que pertenecemos, es una cofradía de deformes y marginados anti sociales, los que nos entregamos a este camino en la vida que es muy bastardeado por muchos ignorantes que se piensan que el único sendero a la felicidad en la vida es nacer, ir a la oficina, salir al boliche, ahorrar mucha plata y morir. Somos gente fea, olorosa y barriguda cubierta por un manto de símil tela negra con instrumentos y muchas cosas para decir.
¿Cómo fue el proceso de grabación? RAFAEL: Fue un poco lento y discontinuo por problemas de salud, dinero y tiempo, pero estuvo lleno de cervezas y entusiasmo, todo el proceso fue agotador física, mental y emocionalmente pero no tiene nombre lo que aprendimos (ni lo que nos reímos). Tuvimos la suerte de toparnos con dos grosos como Maxi y Nico que mostraron un interés genuino por las canciones y que no dudaron en señalarnos qué cosas consideraban buenas y que cosas consideraban malas (a nivel interpretación y ejecución) para que nosotros decidamos qué hacer con ellas. Entramos al estudio con ganas de superar con creces el disco anterior, estábamos enfocadísimos en lograr un sonido más contundente volcando la experiencia de la última grabación, y salimos con ganas de grabar el próximo.
¿Qué cambios internos notan entre “Material de arcadas" y "El Club de los Monstruos"? NICOLAS: Muchísimo. Principalmente fuimos afinando más la puntería en cuanto a los objetivos que tenemos y en la manera en que creemos que se tienen que hacer las cosas. Antes estábamos más perdidos que la mierda, nos metíamos en cualquier lado porque sí y repetimos errores mas de cuatro veces. De todas formas supimos aprender de esos errores y entender que el momento y el lugar exacto no existen y que hay que agotar todas las posibilidades sin ser un pelotudo. En relación con la música nos vamos acercando un poco más al sonido que creemos que tiene que ser el de Hërpes pero nos pasa lo mismo que al pequeño Ozzy, es el mismo deseo, nada cambió y nada es igual. A pesar de todos, somos los mismos que cuando empezamos.
¿Cómo nació el lema "Escuche Herpes o púdrase"? LEANDRO: Ese lema lo utilizamos una vez para poner en un evento en el que íbamos a tocar. Cualquier fanático de Los Simpsons lo reconoce en la propaganda del videojuego Bonestorm que quiere adquirir el pequeño Bartolomeo, pero no tiene dinero y termina robandolo. Se ve que la banda organizadora del evento no estaba al tanto de esta referencia, pareciera ser que estaban mas preocupados en utilizar productos para el cabello y poner boca de patito en las fotos, por lo cual lo creyeron ofensivo y violento, nos pidieron que lo sacaramos, nos negamos, lo borraron, y los mandamos a la mierda a ellos y a su evento, cosa que muy rara vez solemos hacer, gracias a esto el lema fue adoptado, y sirve para agitar la ofensa de gente pacata.
¿Por qué "Pene de Acero"? PABLO: Porque pensamos que hay que mantenerse erguido como tal frente a las adversidades.
En dicha canción aparece la frase "No dejen de hacer canciones de guerra" ¿Cuál es la batalla de Herpes? LEANDRO: La batalla de Hërpes es seguir vivos, seguir en esta música que nos gusta hacer, mejorar , tratar de aportar nuestra parte para que crezca mas la música pesada en nuestra región, ser consecuentes con nosotros mismos y continuar en el camino que muchos abandonan.
¿Cómo ven la escena emergente? NICOLAS: Por suerte está lleno de bandas excelentes y totalmente creativas. Es una pena que a veces no se les de la oportunidad de tener un sonido en el que se puedan apreciar esas virtudes, pero de a poco los espacios se van generando (es decir, hay gente dedicada y llena de pasión que los genera). De a poco se va muriendo la atomización y la exclusión y las bandas van entendiendo que los ataques esporádicos no sirven de nada. Sería una mierda que la banda en la que uno toca sea la única banda como algunos creen erróneamente, lo bueno es que haya muchísimas, que se arme una movida, que las fechas sean una fiesta entre amigos y apasionados de la música, y que quedé en claro que en esta región del mundo el rock está mucho más vivo que en otros lados.
Ademas de la presentación de su segundo LP son parte de la grilla de la primera edición del Heavy Noise Festival ¿Cómo se sienten al respecto? NICOLAS: Estamos muy contentos de participar en un evento tan groso junto a tantas bandas. Le agradecemos a Favio Flores que nos tuvo en cuenta y que siempre confió en la música de Hërpes sin esperar a ser amigo de ninguno de nosotros y sin pedirnos nada a cambio. Es destacable que arme una movida tan arriesgada confiando siempre en las bandas que le despiertan interés más allá de cuánta gente lleven, etc.
Como si fuera poco en noviembre viajan a Santiago del Estero ¿Cómo se preparan para este viaje? RAFAEL: En este momento no podemos pensar en otra cosa que la fecha de mañana, porque va a ser la primera vez en la historia de Hërpes que tenemos la oportunidad de mostrar algo de lo que estamos orgullosos a la gente que nos banca, compartiendo el escenario con amigos y con un buen sonido, por una noche vamos a tener todo a favor, y eso nos asusta. Cuando pisemos Santiago del Estero todavía vamos a estar capitalizando la larga y constante racha de ensayos que nos llevó a animarnos a presentar el disco en Club V.
